Nos habla un salesiano desde Belén

«La comunidad internacional no puede permanecer de brazos cruzados».
«La población está encerrada en una jaula, en una franja de tierra de la que no puede escapar, ya que las fronteras están cerradas. Y en esta situación es realmente absurdo que la comunidad internacional no se mueva, sobre todo sabiendo que quienes pagan son solo víctimas civiles». Lo dijo Luigi Bisceglia, cooperante de la ONG «Voluntariado Internacional para el Desarrollo» (VIS) en Palestina, a los micrófonos de la Agencia Redactor Social.

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